Grandes momentos de la historia del cloneo

No, no me ha dado un arrebato a lo Hormigas Blancas. Pero me ha parecido curioso recordar uno de los grandes momentos del cloneo zarero, en el que la "víctima" se pilló un rebote de los buenos. Corría la primavera de 2006 cuando en Zara aparecieron unas camisetas, de lunares y con una abertura bastante grande en forma de círculo en la espalda. Nada novedoso salvo por el hecho de que eran clavadas al modelo London comercializado por la marca Kling. Que tampoco era nada nuevo, ya que, como hemos visto, las inspiraciones/copias/clones en Inditex son algo frecuente. La original 25 euros. La copia, poco menos de 12.




En Kling no se tomaron nada bien el asunto (cosa de novatillos) y colgaron en su web el siguiente manifiesto:

“La cadena de tiendas Zara ha sacado nuestro modelo London a la venta. Nos gustaría pedirle a sus diseñadores y responsables de colección que la próxima vez que nos copien descaradamente, lo hagan respetando la calidad y el corte”. (...) “Ya sabes, si tú quieres nuestra camiseta London a un precio de 11,90 euros no dejes de darte una vuelta por una tienda Zara. Eso sí, luego nos escribes a info@kling.es“.

Las camisetas de lunares fueron una auténtica plaga ese verano, y el famoso modelo London y la polémica desaparecieron a la misma velocidad que llegaron. No faltaron las voces a favor de Zara, recordando que esas camisetas se vendían en los mercadillos de Londres desde hacía ya tiempo (y no bajo la marca Kling). Vamos, que el clonador había sido clonado. En mis cajones aún guardo mis dos camisetas gemelas, una de Kling y otra de Zara, de las que este año ya nadie habla. Y es que la moda no entiende de marcas a la hora de mandar diseños al olvido.